Qué rápido pasa el año. La vida avanza, y con aquello las estaciones del año modifican los paisajes de los diferentes sectores de la provincia de Curicó. Es el caso del otoño y sus consecuencias en la cordillera de nuestra bella zona, el cual produce nuevos colores de forma natural, y que a la vez nos invita a disfrutarla. Sí, es verdad, los días se vuelven más cortos, hay más frío, neblina, e incluso llovizna en algunos sectores desde la precordillera hacia arriba. Pero esto no es del todo malo, ¿o sí?
A propósito, la pregunta que nos surge es la siguiente: ¿por qué visitar la Cordillera de los Andes curicana en otoño? Respuestas hay múltiples. Aquí te dejamos un par.
COMIENZA LA TEMPORADA BAJA
Desde marzo, cuando se inicia el otoño, se considera la temporada baja, la cual además abarca el invierno y primavera. ¿Qué significa esto? Viajar por todo el territorio será no solo una experiencia única, sino que también mucho más económica. Todo esto a raíz que la demanda por buenos alojamientos o paquetes turísticos decae, por lo que todo es a menor precio. ¡Los pasajes también son mucho más baratos!
MENOS TURISTAS, MÁS ESPACIO PARA DISFRUTAR
Nuestro encabezado lo dice clarito, ¿no? Debido a que la mayoría de las personas no tienen vacaciones durante este período, hay menos cantidad de personas viajeras dando vueltas por la zona, situación que sí se da en meses como enero y febrero. No hay mayor tráfico en la subida hacia Radal Siete Tazas, ni decenas de personas bañándose bajo el puente en Potrero Grande. De este modo, al haber menos turistas en los diversos destinos, puedes disfrutar con más calma los lugares que visites.
LAS ESCAPADAS EN MEDIO DE TIEMPOS DE ESTRÉS, AYUDAN
Así es. Si estás a años luz de tus próximas vacaciones, escaparse un fin de semana a la zona cordillerana te puede traer múltiples beneficios. Salir del trabajo en tus días libres es una actividad completamente renovadora. La semana, el mes, o incluso el año se te puede hacer más corto, siendo un beneficio psicológico muy reparador en esta época. ¡Adiós, estrés!
UN CLIMA QUE ACOMPAÑA
A pesar de que las temperaturas descienden durante otoño, es algo que se puede arreglar utilizando vestimenta adecuada. Una buena parka impermeable, gorro, guantes, y zapatos con agarre para visitar cualquier terreno te ayudarán a capear en algo el frío y el viento de la zona.
MUCHOS ESPACIOS FOTOGRAFIABLES
Si la fotografía es lo que te fascina, mantén tu cámara cargada antes de cada salida. Sobre todo por la mezcla y despliegue de colores anaranjados y verdes, que contrastan con la humedad en los terrenos llenos de hojas caídas. ¡Tremendas postales! Los espacios son mucho más lindos y no debes esperar visitar un lugar específico para disfrutarlos, ya que desde zonas precordilleranas hacia arriba, están a la vuelta de la esquina. Literal.
ESCENARIOS DE PELÍCULA PARA UN BUEN TREKKING
Muchas personas eligen el otoño para disfrutar del senderismo en lugares como Parque Inglés o Los Queñes. Los árboles y sus colores son los principales protagonistas de escenas de película. Eso sí, mantente informado sobre el estado de los senderos, sus horarios de apertura y cierre a diario. Además, ojo con el valor para ingresar a cada uno de ellos, más el grado de dificultad. Hay múltiples opciones para disfrutar, obviamente vistiendo de forma adecuada y siendo responsables. ¡A disfrutar!