Qué lindo y qué poco conocido a la vez es el comesebo. Esta ave, de no más de 16 cms. de largo, es nativa de áreas entre la región de Valparaíso y Tierra del Fuego en Chile, y en diversas zonas del vecino país Argentina. Con un peso entre 20 y 27 grms, el carpintero pardo -como también se le conoce- destaca entre sus pares no solo por su pequeño tamaño, sino que además por su timidez y sus colores, los cuales suelen asimilarse con su entorno. Seguramente serías un afortunado si lo vieras recorrer el bosque entre ramas podridas o viejas.
CARACTERÍSTICAS
Si te fijas, su cabeza destaca por ser grande, a pesar de lo pequeño que es su cuerpo. Llama la atención, adicionalmente, que ambos sexos tienen sus partes superiores de un café oscuro, más el resto de las zonas como cuello o parte alta, las cuales tienen áreas blancas. De pico largo, oscuro, y levemente curvado hacia arriba, suele alimentarse de pequeños insectos, los que obtiene a través de su comportamiento como carpintero, recorriendo los troncos de manera vertical, removiendo las cortezas en medio de los árboles.
A pesar de que sus costumbres son muy parecidas a las de un carpintero, no posee músculos en su cuello. Es por lo anterior que debe hacer nidos en maderas semiquemadas y podridas. Prefiere bosques semialtos y árboles maduros del tipo Nothofagus. Ubica su nido en árboles viejos o en estado de putrefacción, donde suele poner 2-3 huevos de color blanquecino.
La Red de Observadores de Aves de Chile, en su sitio web oficial, habla sobre su período de incubación, el cual dura poco más de 2 semanas, para además mantener sus polluelos casi 1 mes. «El período de incubación dura en promedio 17 dias, los polluelos permanecen en el nido entre 19 y 24 días». ¿Y sus nidos? «Realiza nidos en agujeros de troncos de al menos 14 cm de diámetro, a alturas entre 0.5 y 17.1 m sobre el nivel del suelo, utiliza árboles o ramas muertas o en descomposición», añaden.
A la hora de buscarlo en la Provincia de Curicó, claramente podrías encontrarlo, a pesar de sus colores y pequeñez. El afortunado fue Felipe Ponce (@felipeponrod en Instagram), fotógrafo de aves, quien en sus cuenta personal en Instagram presentó registro en imágenes y video de un bello comesebo grande recorriendo las zonas altas de unos árboles en medio de Parque Inglés. ¡Fantásticas tomas para el archivo!